" Y he aquí se le acercó uno y dijo: Maestro, ¿ Qué bien haré para obtener la vida eterna?
Y le dijo: ¿Por qué me preguntas acerca de lo bueno? Sólo uno es bueno; pero si deseas entrar en la vida, guarda los mandamientos.
El le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús respondió: No matarás; No cometerás Adulterio; No hurtarás; No darás falso testimonio; Honra a tu padre y a tu madre; y amarás a tu prójimo como a ti mismo.
El joven le dijo: Todo esto lo he guardado; ¿Qué me falta todavía?
Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, ve y vende lo que posees y da a los pobres, y tendrás tesoro en los cielos, y ven, sígueme.
Pero al oír el joven estas palabras, se fue triste, porque era dueño de muchos bienes.
Mat. 19: 16 - 22
Hoy en dia la mayor parte de los cristianos, sea cual sea su denominación nos conformamos con cubrir los objetivos mínimos y tener una vida comoda. Cumplimos con los compromisos a duras penad. Asistimos a la Iglesia en muchos casos como parte de la rutina sin plantearnos profundizar en la Fe.
Estos objetivos minimos del Señor no nos complican, no suponen renuncias...
Casi consideramos natural no Robar, no Matar, no ser Adultero... pero cuando Dios nos cala, con frecuencia sentimos esa inquietud que sentía el joven rico por dar un paso mas y ser seguidor activo de Dios.
Nuestra necesidad de Su Reino crece y queremos ser obreros del Señor conscientes que es mucho lo que queda por hacer.....
Hoy, como el joven rico, quizás nos sintamos con ganas de acercarnos a Dios y a su mensaje con disposición de ser mejores discípulos Suyos y le preguntemos... ¿ Qué puedo hacer para mi salvación?
La respuesta de Cristo es la misma que entonces....
SI QUIERES SEGUIRME TE TOCA RENUNCIAR A LO QUE TIENES, A QUIEN ERAS, A ESO QUE TE DABA SEGURIDAD, A TODAS ESAS COMODIDADES. ..
El trabajo es trabajo e implica esfuerzo... ¿ Que esperabamos?
Con que animo le podemos decir a Jesús.... Tu moriste por mí, por mis pecados.... pero la verdad que yo estoy muy comodo con mis cosas materiales y no voy a renunciar a mis comodidades....
El Evangelio habla de lo triste que se fue el joven rico pero... te imaginas la decepcion que se llevó Jesus...
Esa es la decepcion de un Dios que ve a millones y millones de sus hijos viviendo su vida de comodidades y cumplimientos mínimos, de ritos y apariencias.
Hoy Jesús vuelve a estar ante tí esperando tu respuesta....
¿ SERÁS CAPAZ DE PONERTE A TRABAJAR CON LOS ESFUERZOS Y RENUNCIAS QUE SUPONE?
Ojalá que puedas dar ese paso que el joven rico no fue capaz de dar porque lo que el Señor nos promete a cambio es la vida Eterna... ¿ No crees que es un buen pago para ese trabajo?
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